“Con muy poca preparación, damos
el paso hacia el ocaso de la vida. Pero aún así, damos ese paso, con la falsa presunción
de que nuestras verdades y nuestros ideales nos van a servir como solían
hacerlo. Pero no podemos vivir el atardecer de la vida de acuerdo al programa
de la mañana. Porque lo que fue grandioso en la mañana, se volverá pequeño en
la noche. Y lo que en la mañana era cierto, a la noche se habrá convertido en
una mentira.
Encontrar significado en la vida,
y el verdadero propósito en la vida es ser feliz, disfrutar la vida, llegar a
un lugar donde no siempre estés tratando de llegar a algún otro lugar. Tanta
gente pasa su vida luchando, tratando de estar en un lugar donde no están. Les
parece que nunca llegarán. Una de las formas de entender acerca de cómo
encontrar tu propósito en la vida, es retornar a la naturaleza, encontrar tu
propia naturaleza. Cambia tus pensamientos, cambia tu vida.
Todo ser se origina
en el no-ser, Jesús lo dijo de esta manera en el nuevo testamento: Es el
espíritu el que da vida. Que realmente no vienes de tus padres, que todos
nosotros venimos de este lugar llamado espíritu. Que cuando apareces en este
mundo, apareces de una muy pequeña gota de protoplasma humano, y todo lo que
había en ella, se volvió tú. Todo lo que necesitabas estaba en esa pequeña
gota.
Los nueve primeros meses de tu vida, desde el momento de tu concepción, hasta el momento de tu nacimiento, alguien se estaba encargando de todo. No había nada que tuvieras que hacer. No te consumías pensando de qué color iban a ser tus ojos, o cómo se iba a ver tu cuerpo. Se estaban encargando de todo por ti. Te entregabas. Yo lo llamo el tirón el futuro. Y está tirando de ti en la dirección donde sea que se suponga que debas estar. Y no veo exagerado decir que si todo lo que necesitabas para tu viaje físico, estaba ya resuelto ahí dentro. ¿Entonces por qué no todo para el resto e viaje también? Todo tu propósito está ahí dentro. Todo lo que tú, tu personalidad, está ahí dentro. Todo lo que vas a llegar a ser, no sólo tu yo físico, sino todo. Si tan solo DEJAS IR, y permites.
Los nueve primeros meses de tu vida, desde el momento de tu concepción, hasta el momento de tu nacimiento, alguien se estaba encargando de todo. No había nada que tuvieras que hacer. No te consumías pensando de qué color iban a ser tus ojos, o cómo se iba a ver tu cuerpo. Se estaban encargando de todo por ti. Te entregabas. Yo lo llamo el tirón el futuro. Y está tirando de ti en la dirección donde sea que se suponga que debas estar. Y no veo exagerado decir que si todo lo que necesitabas para tu viaje físico, estaba ya resuelto ahí dentro. ¿Entonces por qué no todo para el resto e viaje también? Todo tu propósito está ahí dentro. Todo lo que tú, tu personalidad, está ahí dentro. Todo lo que vas a llegar a ser, no sólo tu yo físico, sino todo. Si tan solo DEJAS IR, y permites.
Y así nacemos. Y miramos a esta pequeña hermosa criatura,
como padres y dices: Buen trabajo, Dios, buen trabajo. No podría ser mejor.
Nosotros nos encargaremos a partir de ahora. Y luego, estamos rodeados por toda
esta gente, nuestra familia, nuestra cultura, adonde sea que vayamos. Y
comienzan a decirnos que no se puede confiar realmente en nosotros y quienes
somos. Que debemos confiar en algo de fuera de nosotros mismos, así que estamos
en un viaje rumbo a la ambición. Y una vez que empiezas a decir: Nos haremos
cargo a partir de ahora… introduces algo, simplemente tomas esta perfección y
simplemente dejas fuera al creador (Edge God Out – EGO).
Este ego es la parte de nosotros que empieza a decirnos que quienes somos no es
esta creación perfecta y divina, esta parte de Dios de la que viniste. No dice
eso, lo que nos dice es: Lo que eres, es lo que tienes. Empieza con cosas como
nuestros juguetes, luego nuestras cuentas bancarias, y luego las posesiones que
tenemos. Antes que nos demos cuenta, comenzamos a identificarnos a nosotros
mismos en base a nuestras posesiones. Empezamos a tener un grupo de creencias
de que mientras más tenga, más valor tendré como persona, y así pasamos
nuestras vidas, tomando a estos jóvenes niños y sumergiéndolos en una cultura
que enfatiza.. MÁS. Se vuelve casi un mantra del ego. Debes tener más, y mientras más tengas, más consciente
estás acerca de cómo otras personas están tratando de quitártelo. Más te
sientes consumido con ¿cómo lo protejo? y ¿cómo hago AÚN MÁS de esto que
tengo?. El dilema aquí es que si eres lo que tienes, y las cosas desaparecen,
entonces quien tu eres también desaparece en el proceso.
El segundo aspecto del EGO es que no sólo soy lo que tengo, sino
también lo que hago. Estamos. Y lo que hago, se convierte en esta cosa llamada “El
Logro”. Y en todo este mundo de creer que soy lo que hago, nos consumimos con
toda esta idea de mi éxito, mi valor, mi mérito como ser humano se basa en
cuánto puedo lograr. Así que tengo que hacer más dinero, debo conseguir un
acenso, debo competir con todo el resto, que están tratando de obtener lo que
yo tengo. Nos enseñan esto una y otra vez y a todos nuestros jóvenes les
enseñan esto cuando van a hacer atletismo, lo más importante que puedes hacer
es ser el número uno. Y ves la palabra número uno, somos mejor que cualquier
otro. Y constantemente nos encontramos en esta noción competitiva nuevamente,
de creer que nuestro mundo es uno en el que tenemos que competir. Eso es lo que
nos dice el EGO todo el tiempo.
Y el tercero aspecto de eso, es la idea de que soy lo que otras
personas piensan de mi. Lo que sería… soy mi reputación. Esto es
particularmente relevante para los jóvenes, a los que se les enseña que deben
vestirse de la forma que otra gente piensa. Que si las demás personas no te
quieren, entonces, hay algo malo en ti. Si te consumes con esas cosas,
entonces, vas a ser algo diferente cada vez que te das la vuelta.”
Wayne Dyer
Lao Tzu en su libro Tao Te Ching
Exelente reflexion... realmente no quiero mas dejar a Dios fuera de mis axiones.
ResponderEliminarEsto es un extracto de la pelicula "El Cambio de Wyan Dyer"...
ResponderEliminarMe encantó...¡Gracias!...